El nombre de la avellana tiene origen en los tiempos del Imperio Romano, en referencia al pueblo Avella, de la Campania, además una ciudad catalana tiene el nombre privilegiado de denominación de origen “la avellana de Reus”. El otoño es la época excelente para recolectar avellanas para llevarlas a nuestras cocinas de una manera sana, y luego poder guardarlas en la despensa para tener para todo el año.
Una de las propiedades de las avellanas es su composición de grasa que se considera cardiosaludable porque dominan los ácidos omega 6 que reducen el colesterol total y los triglicéridos. Por otra parte sus calorías se convierten en una buena energía para recargar pilas en excursiones por la montaña.
Nos aportan una buena cantidad de minerales tales como el magnesio, el potasio y el fosforo que son muy necesarios para el ejercicio muscular. Las avellanas son ricas en vitamina E, antioxidante, esta disminuye el deterioro de las membranas celulares del sistema nervioso y del sistema cardiovascular. Además se considera que consumir habitualmente de frutos secos previene de enfermedades degenerativas como las cardiovasculares o los canceres.
Otras propiedades de las avellanas son su contenido en acido fólico y su aporte de fibra. El acido fólico de las avellanas es muy recomendado en la cocina sana de mujeres embarazadas y niños, por su condición fisiológica que hace que necesiten más esta vitamina. Por otro lado la fibra que contienen las avellanas es laxante, lo que es perfecto para las personas estreñidas, que tomando un puñado de avellanas al día contribuye a resolver su problema intestinal.
Es una opción muy saludable tomar cada día un puñadito de frutos secos, pero crudos, sin tostar ni salar.
ResponderEliminarBesos.
A mi que me encantan todos los frutos secos, un puñadito si que me suelo comer, aunque no a diario, muy buena la información, gracias. Besos.
ResponderEliminarA mi el médico me aconsejó un pequeño puñado de frutos secos para contrarrestar mi colesterol.
ResponderEliminarMe encantan las avellanas crudas.
ResponderEliminarUn saludito
Me pirran las avellanas crudas, en Navidad es el fruto seco que como. Eso sí, las tienen que quitar de delante porque yo comienzo y no paro jajaja.
ResponderEliminarbesines
Buenas tardes Arham. En la puerta de casa tengo plantados dos avellanos y todos los años recogemos unas cuantas avellanas y según caen del árbol me las suelo comer. Muchas gracias por toda tu información, que tanto nos enseña.
ResponderEliminarUn saludo Paco
Hola amigo una información estupenda, gracias por tu visita.
ResponderEliminarPara mi, descubrir las avellanas de Reus fue todo un mundo.
ResponderEliminarYa no entran otras en mi casa.
Saludos
Pues si además de buenísimas tienen todas esas propiedades, habrá que irlas incorpoprando a la dieta ¿no????? Gracias, como siempre, por todo lo que nos cuentas
ResponderEliminarMira a estos frutos secos si que me apunto, aunque no son mis favoritos, pero en casa se toman casi a diario.
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